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3 señales psicológicas del resentimiento en las relaciones

Aunque la esencia del resentimiento puede parecer tan simple como “estoy enfadado contigo porque te olvidas de sacar la basura”, la psicología del resentimiento en las relaciones es más compleja de lo que parece a primera vista. Experimentar resentimiento no es sólo que alguien te caiga mal o te resulte molesto; es un sentimiento asociado a la repetición de patrones dolorosos causados por problemas no resueltos. Sí, lo sé, suena terriblemente complicado, pero en realidad es un concepto bastante sencillo si lo desglosas. Y más vale que dediques algo de tiempo a descifrarlo, porque el resentimiento hacia tu pareja (aunque no te des cuenta de que lo sientes) no es una buena noticia para tu vida amorosa. Sin embargo, la buena noticia es que tu relación no está condenada al fracaso si te das cuenta de que últimamente sientes resentimiento; puedes prestarle atención y afrontarlo.

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No se puede superar el rencor

El concepto de resentimiento en psicología no es un sentimiento aparte, sino más bien el proceso de saborear una emoción concreta sin resolverla de algún modo. El trabajador social clínico Mark Seichel dio una de las definiciones más claras de la esencia del resentimiento en Psychology Today.

“El resentimiento es el proceso mental de reproducir repetidamente el sentimiento y los acontecimientos que conducen a él, lo que enfada e incita. No reproducimos una lista de hechos fríos; los revivimos, lo que tiene efectos devastadores en nosotros emocional, psicológica y espiritualmente.”

Repetir el enfado una y otra vez es un patrón clave del resentimiento, por lo que volver constantemente a recuerdos molestos o desagradables es un signo inequívoco de resentimiento en una relación. Si no dejas de recordar ciertos acontecimientos (como cuando dejaste tu trabajo para mudarte a la ciudad de tu pareja o cuando olvidó tu cumpleaños), estás resentido.

El resentimiento suele asociarse con el arrepentimiento, el sentimiento de enfado o angustia como respuesta a la creencia de que no se ha hecho algo extremadamente importante. Si tus remordimientos están relacionados con decisiones que tomaste por el bien de la relación (por ejemplo, “¿por qué no acepté ese trabajo en la Antártida cuando tuve la oportunidad?”), es probable que esos remordimientos sean la raíz de tu resentimiento.

Hay un subtexto oculto en tus conversaciones

La esencia psicológica del resentimiento en las relaciones es que no es “manifiesto” ni se expresa; está bien escondido y es difícil de captar.

En Relationships And Patterns Of Conflict Resolution, un clásico para los psicólogos familiares, el Dr. Peter Ladd explica que el resentimiento es en realidad una forma de “ira civilizada”. Al igual que la agresión pasiva, oculta la fuerza de las emociones negativas en lugar de mostrarlas abiertamente.

Ladd también sugiere que el resentimiento es inherente al uso del retraimiento como estrategia de resolución de conflictos. Las estrategias de resolución de conflictos son un intento de describir cómo responden las personas ante una discusión, qué con los compañeros y qué con las parejas. Hay cuatro estilos diferentes de resolución de conflictos: rivalidad, cooperación, compromiso y retirada. Las personas que utilizan el último suelen ser pasivas, no están preparadas para la confrontación y a menudo esquivan o intentan evitar resolver el problema. Si esta descripción le suena a su forma de resolver los problemas de pareja, el resentimiento puede aparecer rápidamente.

Ladd explica que si ambos miembros de una relación intentan evitar el conflicto, sus conversaciones normales sobre temas neutros pueden estar llenas de resentimiento. “Esto permite a los hombres resentidos y a las mujeres resentidas descargar la frustración y la ira sin anunciar formalmente que hay un problema”.

La sensación de no ser escuchado

Si lo piensas, esto tiene sentido: el resentimiento está reproduciendo el mismo problema porque nada ha cambiado. La disculpa no se ha producido, la estructura de responsabilidades no ha cambiado y tu pareja no ha intentado hacerte sentir mejor (o lo ha intentado, pero no ha funcionado). Así que vuelves de nuevo a los mismos sentimientos de rabia.

Por eso la British Psychological Counselling Authority califica el resentimiento de cáncer en las relaciones: si no se trata, puede corroer la relación hasta matarla. Mark Seichel identifica tres causas principales del resentimiento: la pareja ha hecho algo malo o desconsiderado, la pareja -no- ha hecho algo importante, o la pareja simplemente no está haciendo “lo suficiente”. Si no afronta el resentimiento en su relación, las cosas empeorarán.

Según el Dr. Oren Emitay, “Si no se aborda el resentimiento y sus causas, la parte ofendida no se sentirá compensada por la pareja, especialmente si el resentimiento no fue hecho a propósito o por un malentendido, en estos casos la pareja ofendida puede ni siquiera ser consciente de ello. La falta de compensación aumenta el resentimiento, que a su vez alimenta el deseo inconsciente y consciente de represalias”.

¿Cómo se perdona el rencor?

Las principales estrategias para superar el resentimiento, sugeridas por Terry Gaspard del Huffington Post, consisten en asumir la responsabilidad del problema principal. En general, ambos miembros de la pareja deben discutir abiertamente el problema y su causa sin negar los sentimientos del otro, mostrarse empáticos, intentar perdonar la ofensa y discutir este tipo de problemas en el futuro. Los psicólogos están de acuerdo en que, sin esto, la ofensa empezará a enconarse y acabará matando la relación.

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